En los siglos transcurridos entre la invención de la imprenta y el nacimiento de los derechos de autor, incluso los hombres y mujeres más ilustrados creían en la necesidad de vigilar la circulación de los libros y reprimir las ideas consideradas perjudiciales para la sociedad. ¿Qué distinguía al sistema de censura romano de los mecanismos de control vigentes en otras partes de Europa? Y, sobre todo, ¿cómo influyó la censura eclesiástica en la evolución de la cultura italiana durante la Edad Moderna? Este libro reconstruye los medios con los que Roma trató de impedir la circulación de libros considerados peligrosos y, al mismo tiempo, las estratagemas con las que autores, impresores y lectores intentaron burlar esos controles. La censura era eliminación, supresión, borrado, pero también sustitución, restitución, reescritura. El éxito de la política religiosa y cultural de la Contrarreforma pasó también por la capacidad de devolver a los fieles una serie de textos en sustitución de los libros que ya no estaban disponibles. El libro desaparecía y luego reaparecía bajo formas diferentes, alejadas, pero no totalmente nuevas al respecto su apariencia original.
Colección: Historia
Formato: 17 x 23 cm., 472 pp.
Primera edición: 2025
Última edición: