Fecha:
16/10/2012
Más de medio siglo después de la publicación de Piedra de Sol, el largo poema del mexicano Octavio Paz (1914-1998), sigue deslumbrando y llamando la atención a lectores y críticos. Considerado ya unánimemente como pieza inexcusable de las letras hispanas del siglo XX, al margen de los gustos de los numerosos detractores y seguidores, Piedra de Sol ha entrado hace ya bastante tiempo a formar parte de nuestra más brillante historia de la literatura reciente, siendo un referente histórico, encuadrado en un lugar y enmarcado en un tiempo determinados, de la poesía hispanoamericana y en concreto de la mexicana, y de una amalgama singular entre la tradición y la vanguardia que no deja indiferente a nadie. De hecho es un poema que pretende trascender cualquier encasillamiento en el tiempo, cualquier eventualidad de las modas y los estilos (aunque, como podemos imaginar, esto es imposible a cualquier objeto artístico, siempre sujeto a las raíces históricas que le atan desde la misma lógica de la creación, recepción, el modo de producción desde el que ha sido concebido, la ideología que lo sustenta, etc.).

En general, la obra de Octavio Paz fue y sigue siendo un manantial de críticas -en un sentido y otro- aunque, sin lugar a dudas, no se trata de críticas injustificadas o arbitrarias sino que adquieren ese valor seguro de una obra alabada y consagrada tras la consecución por parte de su autor del Premio Nobel en 1990. Se ha escrito mucho sobre la obra de Octavio Paz y Piedra de Sol ha ocupado un lugar importante en los repertorios bibliográficos sobre el conjunto de su trayectoria humanística, despertando la curiosidad de críticos y lectores de manera hoy ya casi inabarcable, por la ingente cantidad de textos que supone, pero -en palabras del Premio Cervantes 2009 José Emilio Pacheco, ver la extraordinaria y elogiosa reseña que le dedica aquí [consultada el 21 de agosto de 2012]- hasta ahora sólo este libro, El surrealismo de Piedra de Sol, entre peras y manzanas, publicado en la sello mítico Fondo de Cultura Económica, es el único volumen exento que se dedica a estudiar el citado poema largo.

Lo curioso y atractivo de Piedra de Sol es ese flirteo con la vanguardia que va más allá de una simple asociación al surrealismo, si bien siempre el surrealismo será la vanguardia que sobresalga en la obra de Paz (como también a lo largo de todo el siglo XX). Nos referimos ese legado que la vanguardia dejó y que muy bien supo leer -descifrar, traducir- Paz en obras magistrales como El arco y la lira (publicado precisamente por los mismos años que Piedra de Sol) donde después de analizar diferentes propuestas de vanguardia, y habiendo comenzado con su origen, el simbolismo, se centra fundamentalmente en el surrealismo que fue, sin duda, la más decisiva y la que más y mejores obras dio, influyendo -como bien se sabe- no sólo en literatura sino en otras disciplinas artísticas de manera sobresaliente. Pero Piedra de Sol también es un coqueteo sin tapujos con la retórica clásica y las formas más puras, que para un lector de la poesía del Veintisiete no puede dejar de recordar el célebre soneto de Gerardo Diego, "Al ciprés de Silos", el cual comienza así:

Enhiesto surtidor de sombra y sueño
que acongojas el cielo con tu lanza.
Chorro que a las estrellas casi alcanza
devanado a sí mismo en loco empeño.

donde, en efecto, podemos ver algunas reminiscencias de ese famoso -casi mítico- inicio del poema de Paz:

Un sauce de cristal, un chopo de agua,
un alto surtidor que el viento arquea,
un árbol bien plantado mas danzante.

Víctor Manuel Mendiola (nacido en Ciudad de México en 1954) es un conocido escritor, poeta, novelista, crítico y editor mexicano, con una larga y brillante trayectoria. Entre sus libros de poesía destacan Vuelo 294 (1997, publicado en España en la editorial madrileña Libros del Aire en 2010) o Papel Revolución (1998), y entre sus ensayos podríamos citar, entre otros, Xavier Villaurrutia: la comedia de la admiración (2006). Ha recibido numerosos premios literarios tanto por su obra poética como por su narrativa. Tan oro y ogro, recoge la poesía reunida del autor entre 1987 y 2002, y recibió el Premio Latino de Literatura otorgado por el Instituto Norteamericano de Escritores de Nueva York. 4 para Lulú (2012) es el título de su única novela publicada hasta el momento, con la que consiguió el Premio sor Juana Inés de la Cruz, Letras del Bicentenario. Víctor Manuel Mendiola es autor también de numerosas antologías entre las que destacan Tigre la sed: antología de poesía mexicana contemporánea 1950-2005 (2006), o Sol de mi antojo: antología poética de erotismo gay (2001). Para finalizar este currículum resumido, habría que citar su señalada labor, desde 1979, al frente de la prestigiosa editorial El Tucán de Virginia.

Dicho lo cual, estamos ante un gran libro -podría decirse de igual modo un gran poema- analizado por un gran escritor, un hombre de letras, conocedor de primera mano de la obra de Paz, amigo y colaborador durante varias décadas del Nobel, según confiesa en algunos momentos. Mendiola posee un estilo amable sin descuidar el rigor filológico, pero lejos de los hielos académicos y buscando en todo momento regalar al lector aquel dato curioso y pertinente que sorprende por su frescura y novedad, por su interés más allá del propio dato, la fecha, o la constatación de la autoridad y el despliegue de referencias que se suelen poner a disposición de las propias tesis, forzando la lectura en la mayoría de las ocasiones. Por eso este ensayo se lee de una tacada. Hecho por tanto con pasión y con admiración, quizá como deuda a sí mismo (más que nadie), Víctor Manuel Mendiola nos confiesa que realizó la lectura y las relecturas de este gran poema de Paz cuando era joven, con total entrega, como constata aquí:

Los jóvenes mexicanos de finales del siglo XX veíamos en ese poema de mediados de la centuria un ejemplo, una experiencia dificilísima de emular. Cómo no decidirse a poner en práctica un lenguaje que tenía la fuerza de una gran visión en movimiento y que a la vez no dejaba de vibrar con el corazón; cómo no sentir la tentación de lanzarse a construir un texto en constante ebullición en el juego de las asociaciones y que siempre giraba alrededor de un centro en continuo cambio; cómo no desear escribir una historia de amor tan fogosa y múltiple, atravesada por una moral crítica tan abierta y atrevida. Y al mismo tiempo, cómo animarse a acometer tal empresa si ese poema daba señales contradictorias, marcaba de manera simultánea direcciones opuestas: una en el todavía fresco estilo de la fragmentación y otra en la deteriorada idea de la unidad; una en el ritmo contemporáneo del verso libre y la prosa, y otra en la regularidad anacrónica del endecasílabo, aunque éste fuera en verso blanco; una con los valores románticos de la fantasía y la emoción, y otra con la sospechosa intervención de las medidas clásicas del pensamiento. (p. 26)

Podríamos seguir citando fragmentos de este libro que recomendamos vivamente y por el que damos la enhorabuena a su autor, por el calado de la investigación y por la calidad de su escritura. Pero, además, no sólo se ocupa de la hermeneusis de Piedra de Sol sino de todo el proceso productivo, de la recepción crítica, de los detractores, del momento cultural mexicano, y de tantos y tantos otros detalles interesantes, aparte de analizar otras obras de Octavio Paz que están en relación con Piedra de Sol, ya sea directa o indirectamente, conectándolas a la reflexiones ensayísticas y al pensamiento del Premio Nobel. Es un libro muy interesante que para leer sólo exige una premisa, tener fresca la lectura de Piedra de Sol, y eso siempre es un punto a su favor, ya que volver a leer el gran poema -como ha sido nuestro caso, varias décadas después- siempre es una fuente de sensaciones y disfrute. Para terminar, y para quien quiera una alternativa a leer el poema, escucharlo de viva voz de su autor, lo cual es un lujo, aquí recomendamos este enlace [consultado el 21 de agosto de 2012].

http://www.laestafetadelviento.es/resenas/el-surrealismo-de-piedra-de-sol

Acerca del autor:
Juan Carlos Abril
La Estafeta del Viento

Acerca del libro:
El surrealismo de Piedra de Sol, entre peras y manzanas
Víctor Manuel Mendiola