A Andi nunca le gusta nada, por eso siempre tiene cara de repollo avinagrado. Cuando va a la escuela, no saluda a nadie ni alza la vista. Pero un día encuentra a una anciana que, apenada porque él siempre está triste, le concede tres deseos. Andi no le presta atención, pero a lo largo de la mañana se cumplen sus tres deseos. Cuando regresa a su casa todo parece distinto. En esta historia Andi descubre que lo que se desea no es siempre lo que uno realmente quiere.
                      
                        
                          
                           
                      
                        
                      
                          Colección:  A la orilla del viento (infantiles)
                          Formato: 15 x 19 cm., 38 pp.
                          Primera edición: 1997
                          Última edición: 1997