Fecha:
01/01/2015
El trabajo de investigación de este economista francés –El capital en el siglo XXI– demuestra que el sistema actual está forjando una insostenible desigualdad contra la que hay que poner remedio. Impuestos globales, unión fiscal, transparencia... La tesis de Piketty ha tenido un gran impacto mundial y muchos ya lo tachan como el economista del momento. Su libro, traducido a 30 idiomas, llega a España para seguir alimentando el debate en torno a la desigualdad.

Puede que para muchos haya terminado la crisis, pero no para Thomas Piketty. Este economista francés es el jefe de estudios de la Escuela Económica de París y autor de uno de los libros del año o de la década de asuntos económicos, El capital en el siglo XXI, traducido a decenas de idiomas, llega a España avalado por el éxito que ha tenido tanto en Francia como en otras zonas importantes a nivel mundial como en Estados Unidos, donde es un icono para muchos. Por todo ello es el economista del momento. Joven y con aspecto de profesor de campus, Piketty ha tardado 15 años en recopilar los importantes datos que muestra en su voluminosa obra (663 páginas en la versión española, 700 páginas en la inglesa y 970 en el original francés), en la que se viste de científico para desafiar al sistema capitalista, dadas las desigualdades que se han generado hasta la fecha. Defiende su tesis a base de una avalancha de datos para alimentar el debate sobre la distribución de la riqueza, del que el autor sostiene que se ha cimentado sobre todo de prejuicios. De ahí que en la obra se muestren cifras importantes sobre esta cuestión desde el siglo XVIII hasta nuestros días.
Más que en los números, el problema para Piketty reside en la política y la ineficiencia de las instituciones para resolver los problemas derivados de la crisis actual, especialmente en la zona euro. El ejemplo del Reino Unido y Estados Unidos es evidente para el economista, pues son países que crecen tres veces más que la eurozona. Por tanto –se pregunta el autor–, "¿cuánto tiempo vamos a estar diciendo que la política de la Unión Europea es la correcta?".

La tendencia de los ricos y los impuestos

Lo que ha ocurrido, ocurre y ocurrirá es, según el experto, que la tendencia de los ricos es a hacerse todavía más ricos. El patrimonio de las grandes fortunas ha crecido mucho más rápido que la media y que las propias economías nacionales.
Una bola de nieve que no para y cuya continuidad supone un problema superlativo, dadas las cifras que hay en torno a la desigualdad. ¿Cómo atacar el problema? Piketty propone gravar el patrimonio de las grandes carteras a nivel global y establecer sistemas mucho más transparentes. La primera de las soluciones ha despertado muchas críticas por calificarse de utópica o dañina. "Moverse hacia un sistema global progresivo no solo es posible, sino absolutamente necesaria", declara el francés en una entrevista al diario Cinco Días. De la misma manera, defiende un tipo del 80% para los altos sueldos de los ejecutivos, en aras de buscar mejores rendimientos y comportamientos para sus empresas. El ejemplo, dice Piketty, se puede encontrar en EE.UU., entre 1960 y 1980, cuando el IRPF para más de un millón de dólares era del 82%. En esa época la economía norteamericana creció por encima de la de la etapa de Reagan, recuerda en la misma entrevista. Por todo ello, el experto espera una unión real en Europa, con decisiones democráticas desde países como Francia, Italia o España. Dado el inmovilismo francés y su aceptación de la austeridad alemana, el economista espera que sea el momento de Italia o España, en donde el paro se ha convertido en el principal problema de raíz. Y es que la falta de empleo es la principal desigualdad, imperando la ley del más fuerte y evitando, a su vez, la ansiada equidad económica. No obstante, esta ley del más fuerte es extrapolable a nivel mundial y su extensión podría dar lugar a modelos sociales propios del siglo XIX, cuando la riqueza era un bien hereditario. El eje de este argumento (estudiado en 20 países a lo largo de 300 años) es la fórmula r > g, donde r representa la tasa media anual de rendimiento de capital y g representa la tasa de crecimiento económico. De este modo, en la edad moderna, la r se ha situado entre el 4% y el 5%, mientras que la g lo ha hecho entre el 1% y el 2%. Dado que r es menor que g, Piketty demuestra que el capitalismo genera una desigualdad insostenible. Es ciencia, es economía.

Acerca del autor:
Directivos y Empresas
Directivos y Empresas

Acerca del libro:
El capital en el siglo XXI
Thomas Piketty